Algunos lectores afirman que la Digimin habría desembolsado varios cientos de miles de dólares con la finalidad de que el Grupo Conti (hackers rusos) no hagan público los documentos que comprometerían al presidente Castillo y varios de sus ministros. La realidad es que en la Digimin hay un preocupante silencio que hay la sospecha de que algo grande ocultan. Ayer martes 17 también se conoció que la Contraloría sufrió un secuestro de la información. No fue confirmada ni desmentida.